Mientras leía el currículum de uno de los candidatos para entrar en su empresa, esta madura se relamía al pensar que iba a tener delante a un chico más joven. Cuando lo vio pudo darse cuenta de que estaba muy en forma y decidió usar sus armas de mujer para llamar su atención. La milf se acercó al chaval y le puso sus melones delante de sus narices, hasta ponerle cachondo y terminar follándoselo en su despacho.